4 de julio de 2019.- La Policía Nacional ha iniciado una campaña de investigación para detectar posibles fraudes en las matrículas escolares correspondientes al curso 2019-2020.
Para ello, comprobarán que los datos aportados por los padres en las matrículas son el domicilio real o laboral de los mismos, a fin de evitar que su falseamiento de lugar a errores por parte de la administración educativa en la asignación de puntos a la hora de hacer el listado de alumnos admitidos en los diferentes centros educativos.
En el anterior curso académico se investigó un total de 306 casos denunciados, de los cuales 32 resultaron ser domicilios falsos.
El objetivo es evitar el grave perjuicio que se causa a quienes se quedan sin plaza en el centro educativo que les corresponde por culpa de quienes falsean los datos reales del domicilio para que sus hijos puedan estudiar en un centro distinto al que les corresponde.