SEVILLA 8.10.2020 / Jose Manuel García Bautista
La OMS advierte del nuevo peligro que está generando la COVID-19
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la pandemia del coronavirus ha elevado los niveles de fatiga de los ciudadanos europeos. Es por ello que los expertos solicitan a los países que intenten satisfacer las necesidades de sus ciudadanos y les permitan participar en las decisiones políticas.
Para Hans Henri P. Kluge, director regional de la OMS para Europa, ”los ciudadanos han hecho grandes esfuerzos para contener la COVID-19, la cual ha tenido un coste extraordinario porque nos ha agotado a todos, sin importar dónde vivimos o qué hacemos. Por ello, es fácil y natural sentirse apático y desmotivado, experimentar fatiga”, ha dicho en una rueda de prensa.
La fatiga es diferente según el país, pero los expertos estiman que, en algunos casos, este problema ha alcanzado a más del 60% de la población. De ahí nace la necesidad de que los países conozcan las situaciones de sus habitantes e intenten satisfacer sus necesidades.
La OMS ha trabajado con 27 países, de los cuales han obtenido la información necesaria para conocer el estado psicológico de sus ciudadanos frente a la pandemia.
El director europeo de la OMS también cree necesario que los países “involucren en la lucha contra el coronavirus a expertos más allá de los sectores médicos y de salud pública como, por ejemplo, filósofos, historiadores, teólogos o científicos sociales”.
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Sobre la importancia de la participación ciudadana en las decisiones políticas, Kluge dice: “Es fundamental que respondamos juntos y que las comunidades posean políticas de respuesta con las autoridades. La consulta, la participación y el reconocimiento de las dificultades a las que se enfrentan las personas son fundamentales si queremos tener políticas verdaderamente eficaces. La comunidad debe ser considerada un recurso, así como un destinatario o beneficiario”, ha señalado.
Por último, el experto advierte: ”Al equilibrar las necesidades científicas, sociales y políticas, podemos desarrollar medidas de precaución que sean culturalmente aceptadas. La COVID-19 insta a ir más allá de la ciencia biomédica en la respuesta” afirmó.