PANMUNJOM, Corea. 30 de junio (Associated Press)
Con sonrisas y saludos, el presidente Donald Trump le dio la bienvenida al norcoreano Kim Jong Un en la zona demilitarizada que divide la península coreana.
Trump cruzó el límite que marca la separación entre las dos Coreas en el pueblo de Panmunjom, donde fue firmado el armisticio de 1953.
El encuentro está cargado de simbolismo histórico y destinado a reactivar el diálogo entre las dos Coreas.
Es la primera vez que líderes de Estados Unidos y Corea del Norte se reúnen en esta frontera. Además, Trump se convirtió en el primer presidente de EEUU, en la historia, que pisa territorio norcoreano.
“Es un gran día para el mundo”, expresó Trump. “Estoy orgulloso de haber cruzado la línea” que separa las Coreas, aseguró.
Por su parte, Kim sobre Trump: “Creo que esta es una expresión de su disposición a eliminar todo el pasado desafortunado y abrir un nuevo futuro”.
Acompañado por Kim, el magnate estadounidense hizo varios pasos en territorio norcoreano antes que los dos posararan para los fotógrafos en la línea de demarcación.
Posteriormente, ambos dirigentes volvieron a cruzar la línea e ingresaron en territorio de Corea del Sur, donde formularon unas breves declaraciones a la prensa antes de encontrase con el presidente surcoreano Moon Jae-in.