Sevilla 2 Abr.2019.- La dirección y los sindicatos de CaixaBank iniciaron ayer lunes 1 de abril la negociación formal del Expediente de Regulación de Empleo (ERE), que afecta a 2.157 trabajadores de la entidad bancaria en toda España.
La compañía plantea el tijeretazo para llevar a cabo la reestructuración de su red de oficinas —de las que se cerrarán 793 sucursales, el 18% de la red— y potenciar su modelo de banca digital, según consta en su plan de negocio para el periodo comprendido entre 2019 y 2021
La negociación se pone en marcha después de que se haya agotado sin
avances un ciclo de reuniones informales entre las dos partes,
como han lamentado los sindicatos, que han denunciado que los escasos movimientos
que ha dado la empresa resultan ser meramente “simbólicos”.
Las conversaciones formales durarán 30 días y, si no hay acuerdo, la dirección de CaixaBank podrá aprobar el ajuste de personal de manera unilateral, aunque el período de consultas se podría alargar más allá del plazo perceptivo si lo permite la compañía.
La representación de la plantilla continúa exigiendo a la dirección del banco que renuncie a hacer despidos forzosos si no se cubren voluntariamente las 2.157 extinciones de contrato previstas en el ERE.
CC OO, el sindicato mayoritario, ha criticado el “inmovilismo” mostrado hasta el momento por la dirección en la negociación, mientras que UGT ha insistido en que no aceptará “ni un solo despido forzoso”.