Sevilla, 5 de mayo de 2019.- Quique Setién dice que el fútbol está siendo injusto con su equipo.
El escapismo se ha convertido en la fórmula de disolver cualquier tipo de duda respecto de su falta de solvencia.
El Real Betis Balompié no puede aceptar las excusas a, no solo un mal planteamiento, sino una mala temporada del equipo verdiblanco que le acerca a un paupérrimo reparto de ingresos de La Liga por clasificación.
Es cierto que el Real Betis ha jugado, ha tenido oportunidades, pero le ha faltado lo que es imprescindible en el fútbol: el gol. Y ahí no caben excusas.
Los preparadores técnicos de un club tienen que tener soluciones para resolver las deficiencias que suponen la falta de puntería o de gol. Hoy hasta se ha fallado un penalti.
El mejor jugador del Real Betis, Lo Celso, ha dejado de convertir en gol la clara ocasión que suponía el disparo libre desde los 11 metros. Todo ello supone una falta de preparación psicológica que depende de los técnicos y de la situación que se pueda estar viviendo en el vestuario.
Por el bien del Real Betis esperamos que las soluciones se ofrezcan y sean contundentes. Dos jornadas quedan. Un 13º puesto es muy escaso bagaje para casi 100 millones de euros de presupuesto.
Ser condescendientes con la situación no puede ser la solución, máxime cuando los problemas de existen y los desmentidos no hacen si no certificar su existencia.
A nadie se le escapa que la situación se encuentra fuera de control y alguien tiene que parar esta caída libre, puesto que el presupuesto de jugadores para la temporada que viene, salvo grandes patrocinadores, se está hundiendo por momentos.
