SEVILLA 24.7.2020 / Jose Manuel García Bautista
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) de Andalucía, sindicato mayoritario en la Función Pública, subrayó el riesgo que entraña para los carteros y carteras desempeñar su trabajo debido a las altas temperaturas.
Unas temperaturas que se soportan estos días en muchas zonas de nuestra comunidad y hacerlo además portando la mascarilla obligatoria. Por ello, desde el sindicato, se exige a la dirección de Correos que el reparto postal se limite a las franjas horarias matutinas de menor calor.
La presidenta del Sector de Entidades Públicas Estatales en CSIF-A, María Dolores Carrión, avisó de que estará muy vigilante. Todo ello en relación al cumplimiento de las medidas de prevención contra las altas temperaturas entre el personal de Correos.
Insistió en que labores de reparto deben concentrarse en las horas de menos calor. Señaló además que las oficinas y centros de trabajo deben contar con una climatización adecuada.
Ante las altas temperaturas que actualmente se registran en muchas zonas de Andalucía, deben limitarse las tareas pesadas que requieran un gasto energético elevado.
Deben además adaptarse las funciones más duras a las horas de menos calor, ha recordado la representante sindical, que ha destacado especialmente el trabajo de los carteros y carteras, por la “penosidad” que entraña en esta época del año “y que se ve agravado además por la preceptiva mascarilla, que es absolutamente necesaria, pero indudablemente comporta mayor dificultad para estos profesionales en su día a día”.
Excesivo calor
“Acudir a pisos altos sin ascensor para entregar certificados, subir cuestas en las que hay que empujar el carro o cargar y descargar paquetes” son algunos de los ejemplos que pueden ilustrar “la crónica diaria de un cartero o cartera”, según ha manifestado Carrión.
Se pide a los carteros adaptar el ritmo de trabajo a las circunstancias y recuerda a la empresa que “éste no es un verano al uso y que deberían, más que nunca, reforzarse las contrataciones para hacer frente a la situación”.
Desde CSIF se reivindica “que no se atosigue a nadie porque este trabajo va más allá de salir a andar a la calle y se trata de una actividad con picos muy altos cada día”.
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