SEVILLA 15.11.2019 / Jose Manuel García Bautista
Se está haciendo muy popular, en estos últimos tiempos, la imagen de personas que han sustituido el tradicional cigarrillo por un aparato de vapeo. Pero se ha de tener cuidado pues estos aparatos y las sustancias que se inhalan no están libres de riesgos.
La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ) ya avisó de la toxicidad y del riesgo para la salud que tienen las sustancias que se inhalan de cigarrillos electrónicos y dispositivos de vapeo.
Igualmente pueden dar origen a la aparición de una enfermedad respiratoria desconocida relacionada con estos aparatos.
En Estados Unidos se detectaron más de 200 casos de una enfermedad respiratoria desconocida- entre los meses de junio y agosto- “cuyo vínculo común parece ser la inhalación a través de cigarrillos electrónicos”.
Neumonía y crisis respiratorias son las más comunes que suelen surgir ante el uso de los dispositivos de vapeo.
El doctor Carlos A. Jiménez-Ruíz indicaba que “desde 2013, nuestra Sociedad científica, que reúne a más de 4.000 profesionales de la salud respiratoria, se ha posicionado en contra de estos dispositivos en cuanto a que contienen sustancias toxicas y nocivas para la salud y no deben ser utilizados”.
La horquilla de edades que tienen los afectados está entre los 17 y los 38 años siendo consumidores de los cigarrillos electrónicos.
Los síntomas son tos, sensación de ahogo o dificultad para respirar y fatiga “por el momento, no es posible saber si se trata de una misma enfermedad o de enfermedades distintas con síntomas similares, pero lo cierto es que ya ha provocado un muerto y que el tratamiento no es sencillo, en muchos casos ha sido necesario intubar a los afectados”.
El doctor Jaime Signes-Costa, coordinador del Área de Tabaquismo de la Separ, explicaba que “los cigarrillos electrónicos no son inocuos. También van provistos de nicotina y otros compuestos que se inhalan al vapear y que pueden dañar la salud, sabemos que estas sustancias tóxicas pueden causar cáncer, bronquitis crónica e infecciones respiratorias”.
“El uso de estos dispositivos es nocivo para la salud, y advertir de que la evidencia científica existente respecto a los cigarrillos electrónicos hasta el momento no nos permite conocer cuáles serán sus efectos a medio o largo plazo”
“No se puede descartar que nuevos procesos patológicos como el que actualmente están sufriendo algunos vapeadores en Estados Unidos puedan aparecer”.
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