Bankia y Sabadell planean no reabrir algunas de las sucursales
Los cambios en el comportamiento del consumidor podría ser utilizado como justificación
Las entidades podrían subcontratar servicios de sucursal
MADRID (Reuters) 3.7.2020. –
A medida que España vuelve a abrir después de la crisis de COVID-19, su industria bancaria está aprovechando la oportunidad de reducir su red de sucursales, que durante mucho tiempo ha sido un lastre para la rentabilidad, con solo cuatro bancos hasta el momento planeando al menos 800 cierres de sucursales este año.
A pesar de los importantes recortes desde la crisis financiera de 2008 y más de 2,000 el año pasado, las 24.000 sucursales bancarias de España todavía le dan una de las proporciones más altas de personas en el mundo, según el Fondo Monetario Internacional, solo por detrás de San Marino, Mongolia y Luxemburgo.
La oposición de los sindicatos a los cierres y una población más dependiente del uso de los servicios dentro de la sucursal que otros en Europa han frenado el progreso de los bancos españoles en el cierre de sucursales a pesar de que sus costos operativos son un obstáculo importante para la rentabilidad.
Pero después de cerrar grandes partes de sus redes durante el bloqueo, las entidades crediticias están examinando si los cambios en el comportamiento del consumidor significan que más sucursales pueden permanecer cerradas.
“Muchos de los clientes incluso mayores habrán descubierto que puedes hacer cosas de manera bastante rápida y económica en línea. No estoy seguro de que volverían a hacer las cosas de la misma manera que antes “, dijo Nick Hill, director gerente de la agencia de calificación Moody’s.
Bankia y Sabadell planean no reabrir algunas de las sucursales que cerraron durante el cierre impuesto en España para frenar la pandemia, según las fuentes.
Sabadell y Bankia cerrarán 235 y 140 sucursales este año, respectivamente, mientras que Unicaja reducirá su red tradicional en 100 en los próximos tres años.
Oscar Arce, director general de economía del Banco de España, dijo en una conferencia de prensa esta semana que dependería de cada banco decidir el cierre de sucursales, pero dijo que “había elementos en la red de cada banco que no eran rentables“.
En un sector que lidia con mayores provisiones para préstamos incobrables para hacer frente a la pandemia, el consultor financiero Kearney cree que los bancos españoles deberán reducir los costos entre 2.000 y 3.000 millones de euros a medio plazo para mejorar la rentabilidad, y es probable que los cierres de sucursales ser central para eso.
En España, alrededor del 65% de los contratos de productos y servicios todavía se acuerdan en sucursales, en comparación con menos del 50% en Europa en su conjunto. Eso deja a los prestamistas españoles cautelosos acerca de cortar el acceso a los servicios de sucursales, particularmente en las zonas rurales.
En cambio, algunos están listos para acelerar un modelo que estaban probando antes de la crisis, utilizando una franquicia de estilo McDonald’s para subcontratar servicios de sucursal.
Los prestamistas como Unicaja y Liberbank han comenzado a utilizar agentes independientes para administrar sucursales y vender los productos del banco. El ‘agente financiero’ es responsable de las facturas de alquiler, electricidad y suministro de agua, mientras que el banco proporciona la tecnología y los productos financieros, dijo a Reuters Jonathan de Joaquín Velasco, jefe de estrategia y política de riesgos de Liberbank.
“Nos deshacemos de todos los costos fijos, los convertimos en costos variables, y esto obviamente tiene un impacto muy relevante en la eficiencia con el tiempo“, dijo De Joaquin Velasco.
Cuando Liberbank lanzó por primera vez este modelo con una ‘agencia financiera’ piloto ‘en septiembre de 2016, tenía 992 sucursales tradicionales. A fines del segundo trimestre, el prestamista tendrá 560 sucursales tradicionales y 200 agencias financieras.
Los bancos también pueden usar el modelo para incentivar la venta de productos de mayor margen para clientes más adinerados, haciendo que los puestos de avanzada restantes sean más rentables.
“Reducir la red es una tendencia establecida desde hace mucho tiempo, pero más que reducirla es la transformación de las sucursales, eso continuará“, dijo el director ejecutivo de Caixabank, Gonzalo Gortazar, durante un evento de una escuela de negocios el 18 de junio.
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