Historia Sevilla

Las antiguas Puertas de Sevilla

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SEVILLA 23.1.2020 / Jose Manuel García Bautista

Las Puertas de Sevilla eran los accesos a la ciudad, había puertas reales, públicas y privadas. Cuando terminaba el siglo XV, bajo el imperio de Carlos I, se modifican y las públicas o reales se rectifican para que coincidan con las principales calles, después se ensanchan para facilitar el paso de los carruajes y así se adaptan las murallas y las puertas a las necesidades de la ciudad.

La Puerta de La Macarena, que está frente a la Basílica de La Macarena. Es muy antiguo, de origen almorávide, reformada en el siglo XVIII y por donde pasó el emperador Carlos I el 10 de Marzo de 1526 para celebrar la boda con la hija de los reyes de Portugal, doña Isabel.

El Infante don Fadrique entró, en 1358, por esta puerta, vino engañado por su hermano el rey don Pedro I “El Cruel” que aquí se le llama, porque lo engañó y lo mató.

Por esta Puerta se evacuaron muchos de los cadáveres de la epidemia de peste de Sevilla del año 1649, camino del cementerio en el campo del Hospital; en aquella epidemia Sevilla casi quedó vacía…

Se reformó en 1723 y en 1795 según las dos lápidas conmemorativas que aparecen por su parte exterior al lado izquierdo; y otra situada en el lado derecho, ésta tiene una ordenanza fechada en1630, en la cual se advierte a los guardas de no ejercer su autoridad fuera de la Puerta.

En el año 1836 se hicieron en esta Puerta algunas obras defensivas que comenzaron el 29 de Septiembre de 1836 se hicieron obras en la muralla que fue el foso, todo ello como consecuencia de que la división carlista que mandaba Gómez invadió Andalucía. También se añadió un puente levadizo, como en la Edad Media…

El 17 de Julio de 1854 entró por ella el general Leopoldo O’Donnell.

Además en la puerta puedes ver un azulejo de la Esperanza Macarena, de Manuel Rodríguez y Pérez de Tudela que tiene esta leyenda: “Esperanza nuestra, Ella es morada de Dios y Puerta del Cielo”, junto a ella los escudos de España, Sevilla y la Hermandad de la Macarena. Otra de estás lápidas conmemorativas es del 7 de Mayo de 1923 y se puede leer que la Madre de Dios, en su advocación de la Esperanza “tomó posesión” de dicho arco, siendo descubierta por S.A.R la serenísima Señora y Princesa Dª Mª Esperanza de Borbón y Orleans.

La Puerta de Córdoba, también de origen almorávide, reformada, está frente a la iglesia de los Capuchinos. Esta puerta es muy interesante ya que aún tiene la disposición original y con su fin cerrado y militar, está junto con el postigo del Alcázar y la torre-puerta en el callejón de la Judería. Era la salida normal hacía Córdoba, por eso se llamaba así. Cuenta el cronista González de León, al buen estado de conservación.

Puerta del Sol está cercana a ella está la calle Sol, también es de origen almorávide, está situada a la Trinidad. El nombre le viene del sol que tenía grabado en piedra sobre su dintel. Fue en 1595 y don Pedro Carrillo de Mendoza deja constancia de ello, pero se abandonó y estaba en un mal estado que se temía lo peor, así que en la segunda mitad del siglo XIX pues se derribó, allí también había un torreón muy grande que también desapareció.

Puerta Osario, en la cercanía de la calle Puñón Rostro, cerca del “Muro de los Navarros” y la calle Osario, además estaba próxima a un cementerio…, extramuros por supuesto, esta puerta se la llamaban en la época musulmana Aljar o Vib-Alfar, que era el nombre del maestro alarife que la construyó. En 1579, se remodeló siendo el asistente de la ciudad el Conde de Barajas.

En esta puerta había una capilla dedicada a la Virgen del Rocío y una inscripción que decía: “Reinando Doña Isabel II, año de 1849”. Pero apenas duró veinte años más…

Puerta de Carmona, almorávide, en el siglo XVI, en la esquina de San Esteban con Menéndez y Pelayo. Aquí estaban los famosos Caños de Carmona de los que quedan un fragmento donde antiguamente estaba el puente de San Benito… Aún recuerdo a esos nazarenos con su capa blanca y el capirote de terciopelo azul por ese puente enfilando San Esteban, una estampa perdida al derribarse el puente… La Puerta de Carmona se tiró en 1868.

Como cosa curiosa habría que decir que en el frontis estaba colocado el escudo de armas de los Duques de Alcalá, alcaldes de las prisiones que había en el segundo cuerpo de la Puerta.

Estaba también el Postigo del Jabón, a mitad de la calle Tintes y la Puerta de la Carne, almorávide, reformada en el siglo XVI; ubicada en la calle Menéndez y Pelayo a la altura de la calle Santa María la Blanca y la calle Cano Cueto. Se derribó en 1864.

Se la llamó también la Puerta de las Perlas o Puerta de la Judería ya que daba al barrio de los judíos o la zona llamada de grande Alhamia. Al final el matadero cercano sirvió para que se quedara su nombre como Puerta de la Carne.

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