SEVILLA 27.3.2021 / Jose Manuel García Bautista
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Otro gran imaginero de la Semana Santa sevillana es sin dudas Juan Martínez Montañés, este sevillano de adopción nacido en Alcalá la Real un 29 de Diciembre de 1568, su calidad artística y observación le hacían tallar obras de un pavoroso barroquismo, casi toda su obra es de carácter religioso aunque quizás pocos conozcan de él que en 1635 realizó un busto de Felipe IV en barro y que junto a un retrato ecuestre del sevillano Diego Velázquez serviría para la posterior obra de Pietro Tacca de la estatua del rey que hoy encontramos en la plaza de Oriente.
Algunos lo apodaron “el dios de la madera” y aunque sería difícil destacar alguna obra, por la incuestionable calidad de todas ellas, valgan las imágenes de la Virgen de Estrella o de la Encarnación, o la siempre conmovedora de Jesús de la Pasión…
Martínez Montañés falleció en Sevilla víctima de un brote de peste que asoló a la ciudad en 1649, era el 18 de Junio, sus restos fueron vistos en un carro junto con otros muertos cuando iba camino de la fosa común en extramuros, cerca del hoy Parlamento de Andalucía, el ya conocido por nosotros como Hospital de las Cinco Llagas.
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Precisamente cuando entregó la imagen del nazareno a la hermandad de Pasión, imagen que se le encarga en 1616, todos quedaron asombrados por el prodigio escultórico de aquella imagen.
Al propio Montañés se le podía ver por las calles de la ciudad en Semana Santa tratando de contemplar su obra por las callejuelas y bocacalles. Dicen que el escultor extasiado llegó a decir de Él: “¡Sólo le falta hablar!” Quizás cual aquel Miguel Ángel Buenarroti que le pedía a su recién esculpido Moisés: “¡Habla!”.
Cuentan sobre la imagen del nazareno de Pasión que siendo visitado por el arzobispo de Sevilla Antonio Despuig y Dameto se acercó al Señor y dijo: “Observo un fallo”… Todos se miraron entre sí de la barbaridad que estaba diciendo aquel religioso… Observando el arzobispo las cariacontecidas caras de sus acompañantes argumentó y añadió: “Le advierto la falta de la respiración”.