La Información 23.9.2019.-
El consejo de administración no ejercerá el derecho de tanteo ante la oferta presentada por Ramón Areces Fuentes, sobrino del patriarca del grupo.
Dimas Gimeno ha intentado en vano salir del capital de El Corte Inglés. / José González
El consejo de administración de El Corte Inglés no ejercerá el derecho de tanteo que posee sobre la participación de Ramón Areces Fuentes, hijo de Celestino Areces y sobrino carnal de Ramón Areces Rodríguez, patriarca y principal adalid del gigante español de la distribución comercial.
Los títulos en venta representan un escaso 0,7% del capital, pero la negativa del máximo órgano de gobierno a adquirir este paquete accionarial demuestra bien a las claras la posición refractaria de la nueva presidenta, Marta Álvarez, y su hermana Cristina a facilitar la salida del capital de los accionistas y herederos históricos de la compañía.
La participación de Ramón Areces Fuentes equivale a un total de casi 570.000 títulos en números redondos, teniendo en cuenta que el capital de El Corte Inglés está distribuido en 81,14 millones de acciones.
El precio mínimo solicitado es de 108 euros, por lo que el importe total de la operación se situaría en 61,5 millones de euros, lo que supone una valoración total de empresa de 8.763 millones.
Esta cifra representa un descuento del 13% sobre los 10.000 millones de euros en que fue tasado El Corte Inglés en julio de 2015, cuando el jeque catarí Hamad Bin Jassim Al Thani irrumpió en el grupo con un crédito de 1.000 millones convertible en un 10% del capital.
Ramón Areces Fuentes motivó su deseo de abandonar el accionariado del grupo en una carta enviada este verano al consejo de administración de la empresa ante la imposibilidad de materializar la venta de sus títulos en el mercado.
La falta de liquidez de las acciones y la negativa de los administradores a impulsar una salida a bolsa que la propia entidad considera inviable obligan necesariamente a trasladar ante el máximo órgano de gobierno cualquier proyecto de desinversión por parte de los accionistas minoritarios.
Todo ello con el agravante de que tampoco existe una valoración certera sobre la que establecer un marco de relaciones efectivo para llevar a cabo las eventuales transacciones accionariales.
La negativa del consejo a comprar esta pequeña participación supone un aviso inequívoco para el resto de navegantes que, de una forma u otra, han mostrado también su intención de saltar del barco.
Es el caso sobre todo y principalmente de Dimas Gimeno, el primo descabalgado hace poco más de un año de la presidencia de El Corte Inglés, que pretende liquidar también su posición en la empresa.
El problema para Gimeno es doble porque además de las consabidas dificultades para materializar la venta se da la circunstancia de que su participación es de carácter indirecto y se estructura a través de la sociedad de cartera IASA, en la que posee junto con su madre, María Antonia Álvarez y su tío Cesar Areces, un 32% de la propiedad, equivalente a un 7% de El Corte Inglés.
Cartera IASA está controlada en el 68% restante del capital por Marta y Cristina Álvarez, quienes lógicamente no tienen ningúna intención de disolver su empresa instrumental para facilita que su primo y sus tíos puedan liquidar su participación.
No en vano, Cartera IASA controla el 22% de El Corte Inglés, por lo que los títulos que quiere vender Dimas Gimeno son manejados directamente por las hermanas Álvarez a la hora de hacer valer sus derechos políticos de voto en el capital del grupo.
La posición accionarial de Cartera IASA tiene un carácter estratégico para las dos herederas de Isidoro Álvarez quienes también ejercen su dominio sobre la Fundación Ramón Areces, propietaria del 37,5% de la empresa.
La suma de ambas partidas es lo que ha permitido a Marta Álvarez convertirse en presidenta de El Corte Inglés después del breve interregno de Nuño de la Rosa, relegado ahora de facto en la estructura de dirección en beneficio de Víctor del Pozo, máximo responsable ejecutivo de todo el negocio básico de retail de la empresa de grandes almacenes.
Un 25% del capital en expectativa de venta
Además de Dimas Gimeno y de Ramón Areces Fuentes, la familia García Miranda, con un 10% del capital, ha mostrado igualmente la intención de vender sus participaciones.
Esta saga accionarial, que incluye a Cartera Mancor, cuenta con Paloma García Peña como consejera de El Corte Inglés en alianza con las accionistas mayoritarias.
No obstante, algunos otros de los herederos de José Antonio García Miranda, primo de Isidoro Álvarez, han decidido también poner tierra de por medio con la empresa en la que no tienen ningún otro interés, más allá del dividendo que reportan sus títulos.
En última instancia, y también con su natural tendencia a monetizar la participación adquirida en los últimos años, el jeque Al Thani quiere disponer de garantías que le aseguren a partir de 2020 la venta del mencionado 10% que posee en la compañía.
Sumando todos estos paquetes accionariales se pueda decir que alrededor de un 25% del capital de la entidad se encuentra ahora en expectativa de destino, lo que supone probablemente el desafío más importante al que va a tener que enfrentarse Marta Álvarez en su papel de primera dama, a la par que máxima responsable, de El Corte Inglés.
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