Uno de los brotes más mortíferos de Europa apareció bajo control en mayo, pero la cultura cordial de España puede estar ayudando a nuevas infecciones
Redacción, 14 Agosto 2020.- Según publica The Guardian, en mayo resonaron aplausos y vítores cuando España cerró su hospital improvisado más grande.
En lo que se consideró un punto de inflexión simbólico en una de las batallas más letales de Europa con Covid-19.
Menos de cuatro meses después, el ejército español ha sido enviado nuevamente a construir un hospital de campaña.
Esta vez en la ciudad nororiental de Zaragoza.
Mientras el país se enfrenta a una de las tasas de infección más altas de Europa occidental .
“Estamos en un momento crítico”, dijo Helena Legido-Quigley, profesora de salud pública nacida en Barcelona en la Universidad Nacional de Singapur.
Unas ocho semanas después de que el país saliera de uno de los bloqueos más estrictos de Europa, un aumento de casos en las áreas del noreste y centro ha hecho que España lidere Europa en número de casos nuevos confirmados.
La tasa de infección de 14 días del país es de 100 por 100.000, según el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades.
Solo detrás de Luxemburgo en Europa, y mucho más alta que la tasa de Francia de 32 o los 8,2 casos de Italia por 100.000.
Sin embargo, el número de muertes sigue siendo bajo, con 70 registradas la semana pasada.
Lo que sugiere un resurgimiento del virus que es distinto de la crisis que devastó el país en marzo y abril.
Alrededor del 85% de los casos nuevos se encuentran entre personas menores de 65 años.
Lo dijo el jueves el jefe de respuesta de emergencia de salud del país.
“En este momento, no me atrevería a describir esto en absoluto como algo parecido a lo que vivimos en marzo y abril”, dijo Fernando Simón.
Si bien todas las regiones están viendo un aumento en los casos, solo el 3% de las camas están ocupadas actualmente por pacientes con coronavirus.
“En España no existe un riesgo inminente de colapso del sistema sanitario”.
Aún así, el aumento de las cifras ha provocado temores de un regreso a los días oscuros que dejaron a España con uno de los mayores índices de muertes en Europa.
En Aragón, las autoridades solicitaron la instalación de un hospital de campaña en el aparcamiento de un hospital de Zaragoza como medida de precaución.
En Madrid, uno de los hospitales más grandes de la ciudad dijo que había comenzado a cancelar operaciones no urgentes.
El jueves, nueve organizaciones científicas publicaron una carta advirtiendo del riesgo de un “colapso” del sistema de atención médica.
“Si la situación continúa y no se adoptan nuevas medidas, existe una alta probabilidad de que volvamos a enfrentar la situación vista durante el estado de alarma”.
En la región occidental de Extremadura, el ministro regional de Sanidad dijo a los periodistas que “sin duda, estamos viendo una segunda ola del coronavirus”.
El gobierno español ha apuntado a un aumento de las pruebas para explicar las cifras.
Hasta ahora se han realizado casi 7,5 millones de pruebas en todo el país, incluidas más de 400.000 la semana pasada.
Más de la mitad de las nuevas infecciones detectadas son en pacientes asintomáticos, agregó.
Los expertos en salud pública apuntan a otras razones. “El alivio del encierro fue muy rápido, pasando del confinamiento a la vida normal en solo unos días.
“Era demasiado pronto ”, dijo Joan Caylà, jefe de la Unidad de Investigación de Tuberculosis de Barcelona, que ahora se centra en Covid-19.
La fiebre probablemente se debió a la presión del sector turístico, agregó, un pilar de la economía que representa alrededor del 12% del PIB del país y uno de cada ocho empleos.
Al mismo tiempo, pocas regiones disponían de los recursos necesarios para realizar un seguimiento adecuado de los contactos.
“Si hubieran rastreado mejor los contactos a finales de junio y principios de julio, cuando hubo muy pocos casos, habrían podido controlar mejor la transmisión”, dijo Caylà.
En Madrid y Cataluña, los gobiernos regionales han sido criticados por subestimar la necesidad de trazadores de contactos.
El resultado es una gran disparidad en los casos entre las regiones de España, que son responsables de la asistencia sanitaria.
Aragón se sitúa como el más afectado, con 573 casos por cada 100.000 habitantes.
Frente a 144 en Cataluña y 162 en Madrid, según datos del Ministerio de Sanidad del país.
La tasa desciende hasta el 27 por 100.000 en el hotspot turístico de Canarias.
En Aragón y Cataluña, los brotes también se han relacionado con los trabajadores agrícolas de temporada, que a menudo trabajan en condiciones de hacinamiento.
Y, en ocasiones, se han quedado durmiendo a la intemperie , a pesar de las advertencias de que estas condiciones los dejan más expuestos al virus.
“No hubo planificación alguna”, dijo Legido-Quigley. “Esta fue una crisis de salud, pero también una crisis social”.
El investigador estaba detrás de una carta reciente, firmada por 20 importantes epidemiólogos y expertos en salud pública y publicada en The Lancet.
En la que pedía una investigación independiente sobre por qué España se encuentra entre los países europeos más afectados por la pandemia.
A pesar de un sistema de salud universal relativamente sólido.
Un factor podría ser la cultura altamente social de España, donde las grandes reuniones entre amigos y familiares son la norma.
Lo indica Ildefonso Hernández, profesor de salud pública en la Universidad Miguel Hernández de Alicante.
“Afortunadamente estamos en verano y muchas de estas interacciones ocurren al aire libre”.
“Pero es inevitable que algunas interacciones ocurran en espacios cerrados y a corta distancia”, dijo.
El impacto de estas interacciones se magnifica ya que los españoles suelen vivir en hogares multigeneracionales en comparación con la mayoría de países europeos.
En un esfuerzo por moderar el creciente número de casos, las regiones de España han implementado una serie de medidas.
En el noroeste de Galicia y las Islas Canarias, las autoridades han prohibido fumar en la calle y en las terrazas de los restaurantes.
Las máscaras se han hecho obligatorias en todo el país, mientras que la vida nocturna se ha reducido en algunas regiones.
Las próximas semanas probablemente resulten decisivas para España.
Especialmente en momentos en que áreas metropolitanas como Madrid y Barcelona luchan por asegurar la capacidad sanitaria necesaria para probar y rastrear mejor los contactos.
Señaló un estudio, realizado en más de 60.000 personas en toda España a principios de este año, que mostró que solo el 5% de la población tenía anticuerpos contra el virus.
“Eso significa que hay mucha población que aún puede estar infectada”, dijo Hernández.
“Esto es un maratón, no un sprint”.
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