En la jornada del lunes entraron en territorio español más de 5.000 inmigrantes ante la pasividad de Marruecos
PABLO BORREGO 18/05/2021
La tensión crece en Ceuta y Melilla ante la peor oleada de inmigrantes que se recuerda. Ayer, más de 5.000 inmigrantes entraron a nado en territorio ceutí, bordeando los espigones que separan las fronteras del Tarajal y Benzú. Entre ellos se estima que hubiera unos 2.000 menores, lo que dificulta su repatriación de forma inmediata. No obstante, informa el gobierno de que habrían sido devueltos unos 1.500.
Una persona falleció ahogada y otras dos personas necesitaron maniobras de reanimación. Ni la presencia del Ejército, que llegó al lugar en torno a las 2:30 de la madrugada, ha parecido amedrentar a los inmigrantes que siguieron entrando una vez que corrió el rumor de que las fronteras estaban abiertas. La noche ha sido caótica en Ceuta, sucediéndose disturbios entre los mismos inmigrantes así como de éstos con los cuerpos de seguridad.
El desencadenante
El comienzo de todo fue cuando el pasado 8 de mayo hospitalizó en territorio español el líder del Frente Polisario, en disputa con Marruecos por el Sáhara Occidental. El país africano declaró entonces que se trataba de “un acto premeditado, reconocido por Marruecos y que sacará toda las consecuencias”.
Desde entonces, desde Rabat se cortaron las relaciones diplomáticas con España y el director central de la Policía Judicial de Marruecos afirmó que han roto los acuerdos en materia de seguridad. Esto incluye tanto la cooperación antiterrorista como el control de sus fronteras.
Un precedente similar
Marruecos presiona así a España y los hechos de ayer recuerdan a la famosa `Marcha verde´ con la que el país africano se hizo con el Sáhara Occidental en 1975 aprovechando la desestabilidad en España producida por aquel entonces por la muerte de Franco. El rey Hassan II organizó una gran marcha pacífica de civiles, que acabaron ocupando el lugar.
Según expertos en geopolítica, esta estrategia de Marruecos podría estar dentro de lo que se denomina como `Zona Gris´. Esto no es más que el conjunto de actuaciones que lleva a cabo un actor, normalmente los Estados, para conseguir sus objetivos a través de medios alternativos a aquellos que supongan el uso de la fuerza, aunque a veces se llegue al límite. La `Zona Gris´ engloba desde campañas de desinformación, amenazas de sanciones económicas, acciones de propaganda y operaciones de influencia en medios de comunicación del país rival, etc.
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En diciembre de 2020, Saadeddine Othmani, primer ministro marroquí, declaró que “primero habrá que concluir la cuestión del Sáhara Occidental” pero que “Ceuta y Melilla serán puntos en los que inevitablemente habrá que abrir un debate”.
Es de sobra conocido que Marruecos considera que Ceuta y Melilla son territorios que deberían estar dentro de sus fronteras. Y si bien es cierto que la diplomacia ha reinado en los últimos tiempos, habrá que ver hasta qué punto es capaz de llegar el país vecino para hacerse con las ciudades autónomas de España.
Reacciones en el Gobierno de España
El presidente del Gobierno ha cancelado su viaje programado a París por la crisis. Ha declarado que la respuesta de España será mantener la “máxima firmeza”. Mientras tanto, Arancha González Laya, ministra de Asuntos Exteriores, no concibe que los hechos tengan que ver con el desencuentro con Rabat por la acogida del líder del Frente Polisario y miles de personas siguen abandonando territorio marroquí poniendo en peligro sus vidas.
