MISTERIO

El tesoro de nadie

Sharing is caring!

SEVILLA 25.7.2020 / Jose Manuel García Bautista

Es una pequeña isla frente a las costas de Nueva Escocia, en Canadá, se la llama isla de Oak y en ella se iba a producir uno de misterios más estudiados de su tiempo…

Era el año 1795 y Daniel McGinnis, un chico de 16 años, se acercó en una barca la isla para explorarla y pasear, estaba de vacaciones y le pareció una buena idea.

Mientras caminaba en aquel entorno pasó entre unos robles, no en vano la isla es llamada “La isla de los Robles”, y observó que bajo una rama cortada había una polea… El chico, con la imaginación desbordada, pensó que podía ser el vestigio de un viejo tesoro pirata y decidió ir a buscar a unos amigos para comenzar a cavar en aquel mismo lugar…

Junto con otros dos chicos se pusieron a cavar y, era evidente, que alguien ya había realizado la misma labor en aquel lugar; cuando había profundizado un medio metro encontraron piedras que habían sido puestas allí como tapadera, esto se repetiría a los tres y seis metros con placas fabricadas en madera de roble.

Pero seguían cavando y no aparecía nada, así que decidieron dejar de cavar y se marcharon si haber encontrado su fabuloso tesoro.

La historia del hallazgo trascendió y desde ese año han sido muchos exploradores los que se han acercado al pozo del tesoro en la isla de Oak a tratar de desvelar su secreto, pero por muchas investigación que se han realizado este sigue sin ser revelado…

Simeon Lynds continuó cavando en el lugar y su expedición descubrió más tablas de madera, a cada tres metros y también planchas de fibra de coco.

Cuando llegaron a veintisiete y treinta metros de profundidad, toparon con una losa, una losa fabricada en pórfido, material que utilizaban desde tiempos inmemoriales civilizaciones como la egipcia o la romana. a losa tenía grabada su superficie con grafías extrañas –la losa actualmente está en paradero desconocido- que una vez descifradas decía: “40 pies más abajo hay enterrados 2 millones de libras“.

La sorpresa llegó cuando bajo la losa comenzó a fluir el agua… Y la expedición tuvo que abandonar su empresa a casi una treintena de metros de la superficie.

En 1.849, los dos amigos que ayudaron a Daniel McGinnis, ayudaron a la Sociedad Truro en intentar resolver el misterio del pozo del tesoro. La expedición estaba dirigida por Joham B. McCully, ideó un sistema para desviar el agua que surgía con las mareas y encontró una posible cámara en la que estaría guardado el tesoro, pero no pudieron acceder a ella.

Lo intentó en 1861 pero el resultado fue igualmente infructuoso: el agua y el barro formaban un obstáculo que se renovaba y resultaba infranqueable.

Para unos el pozo del tesoro de Oak Island esconde la fortuna de los Caballeros Templarios, el tesoro Sir Francis Drake o el Capitán Kidd, o joyas de la Corona Francesa desaparecidas en 1791, ¿quién sabe?

Hoy no sabemos cuál es el misterio, o tesoro, que esconde esta isla, sus actuales dueños siguen buscando el tesoro. Quizás en un futuro podamos descubrir uno de los misterios más reales a los que tenemos acceso, sólo es cuestión de cavar…

TE ASESORAMOS

ESCÚCHANOS

https://www.eliteradiosevilla.es

Related posts

Zombis, más allá de la realidad

Jose Manuel Garcia Bautista

Una expericiencia psicofónica que convenció a la Ciencia

Jose Manuel Garcia Bautista

El mito de la Atlántida en Mesoamérica

Jose Manuel Garcia Bautista

Leave a Comment

shares