SEVILLA 18.7.2020 / Jose Manuel García Bautista
Sucedió un 16 de julio de 1596 en una España donde los Reyes Católicos habían instaurado, y dejado como herencia, una desmedida fe cristiana que estaba muy arraigada en todos los estamentos de la sociedad.
En la época se miraba con devoción a lo divino, a la Alturas, a todo lo que regía la vida de las criaturas de Dios y en todo estaba la obra de Él o de la Virgen, o de Jesucristo, nada escapaba a ese control eclesial máxime cuando funcionaba la temible Inquisición.
misterio, enigmas, élite radio, élite diario, Historia, secretos, desconocido, paranormal, sobrenatural, inquietante, inexplicableQuemaban y robaban ornamentos religiosos.
Llegaron a la Virgen del Rosario de la Hermandad del Rosario, irreverentemente la arrastraron hasta la explanada de Santo Domingo…
En este lugar se cebaron con un cuadro de la Virgen del Populo que tiroteaban y que estaba en la entrada de la Villa; no sólo eso: acuchillaron el cuadro de la Santísima Trinidad…
Una noche para no olvidar donde estos “piratas” amparados camparon a sus anchas por nuestra bella ciudad.
El resultado se la noche de terror fue inolvidable con 685 casas destruidas o deterioradas, incluyendo nuestra eterna Catedral.
En otro acto de locura antirreligiosa soldados ingleses sacaron del Convento de la Candelaria a la Virgen para quemarla y que fue salvada por un vecino cuando la sacó, sigilosamente, del fuego consumidor…
Pasaron unos meses y en una casa cercana al convento vivía un chiquillo, un día, mientras jugaba cayó aún pozo y todos creían que había perdido la vida, se actuó rápido, se buscaron cuerdas y se alertó a otros vecinos de los sucedido… “Se ha matado, se ha matado”, gritaban.
Sucedió lo imposible
Todo se sumergía en la tragedia, los padres lloraban amargamente la muerte del niño, para colmo no lo podían sacar de un agujero que daba agua a la comunidad de vecinos.
Pero sucedió lo imposible: en ese ambiente trágico subió el nivel del agua y al subir el agua llevó consigo al niño que estaba en perfecto estado y sonreía su suerte.
Colmado de besos y abrazos le dijeron a aquel niño que como se había salvado y el chico atinó a decir que una hermosa Señora lo recogió en sus brazos y evitado su muerte…
Los vecinos dispusieron que se bajara al interior del mismo y al llegar a lo más profundo encontraron la imagen salvada de la Candelaria, que igual que a ella la salvaron del fuego quiso salvar al chico de la muerte.
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