Sevilla, 7 de abril (EFE).- Este año el arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, no levantará la dispensa del precepto de ayuno y abstinencia del Viernes Santo, como era habitual.
Asenjo que considera que “el ayuno nos unirá a tantas personas enfermas y en cuarentena que tanto están sufriendo en las tristes circunstancias que estamos viviendo, o a cuantos se están sacrificando por todos nosotros.
EL ARZOBISPO RESPONDE
Asenjo así le ha respondido a un fiel que le ha hecho la pregunta “también en este año la Archidiócesis va a dispensar del precepto del ayuno y la abstinencia el Viernes Santo?, en la sección “El arzobispo responde” de la revista semanal del arzobispado sevillano.
El prelado recuerda que el cuarto mandamiento de la Iglesia obliga a ayunar y abstenerse de comer carne en los días establecidos, uno de ellos el Viernes Santo, pero que en ocasión de las muy numerosas prácticas de piedad que se realizan en Sevilla, como son las estaciones de penitencia, Vías Crucis, etc. en años anteriores se dispensó de este precepto.
“Este año no vamos a tener ocasión de realizar públicamente estas prácticas piadosas.
Por ello, consideramos que debemos mantener el ayuno y la abstinencia del Viernes Santo.
Nos ayudará a estar más abiertos a la Palabra de Dios, que debemos escuchar con mayor docilidad especialmente en estos días”, ha afirmado.
AYUNO COMO MEDIO DE UNIÓN
Para Asenjo, el ayuno también unirá a los fieles a “tantas personas enfermas y en cuarentena que tanto están sufriendo en las tristes circunstancias que estamos viviendo, o a cuantos se están sacrificando por todos nosotros”.
El ayuno -según el prelado- “hará más agradable al Señor nuestras oraciones si dedicamos el fruto del ayuno a la caridad con los necesitados”.
Asimismo, el ayuno servirá -prosigue en su respuesta- para que podamos llegar con espíritu renovado a la alegría del Domingo de Resurrección.
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